Este fin de semana numerosos vecinos hicieron públicas sus quejas por la calidad del agua en sus hogares: turbiedad y «gusto a barro», fueron las principales quejas. ¿Cuál fue la respuesta de Enio Mazzini, presidente de Cosag?
Este fin de semana varios vecinos de distintos puntos de la ciudad hicieron público su descontento debido a la mala calidad del agua cuando abrían las canillas de sus casas.
«Es un asco el agua, es inadmisible que se pague por ese pésimo y lamentable servicio», expresa una vecina a través de sus redes sociales, en una larga fila de mensajes en contra del servicio de Cosag.
«Lo que está ocurriendo es que es muchísimo el consumo. Hay mucha variación en la presión de agua en las redes y esto produce cierta turbulencia, más allá de que estamos desde hace una semana tratando agua del río crecido: el agua trae mucho arrastre de barro y eso se puede advertir un poco de gusto. Lo que ocurre también es que la red, en las horas pico de consumo, baja la presión, eso ocurre en toda la ciudad. Cuando recupera la presión se puede advertir un poco de color», explicó Enio Mazzini, presidente de Cosag, en diálogo con Redacción Alta Gracia.
Dato no menor, es que la Cooperativa de Trabajo Obras Sanitarias de Alta Gracia Limitada (Cosag) anuncia al menos una vez por semana el resentimiento de agua en distintos sectores debido a roturas de caño y trabajos de reparación.
«En toda la ciudad está muy exigido el servicio, durante la noche se cargan los toques. Es un momento complicado en la prestación en toda la ciudad», agregó Mazzini.
Por otro lado, en la última sesión del Concejo Deliberante se declaró en Alta Gracia la emergencia hídrica: un proyecto presentado por la oposición y avalado por el oficialismo.
