El terreno, ubicado detrás del Vivero Municipal en barrio Córdoba, será destinado a la construcción del edificio para el nivel secundario.
En una sesión extraordinaria, el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad la donación de un terreno municipal al Colegio San Vicente de Paul. El terreno, ubicado detrás del Vivero Municipal en barrio Córdoba, será destinado a la construcción del edificio para el nivel secundario de la institución educativa.
La escuela San Vicente de Paul, junto a la Parroquia Buen Pastor, funciona en barrio Córdoba desde hace 66 años. Su historia se remonta cuando las Hermanas Vicentinas comenzaron a impartir catequesis en la zona, respondiendo a la necesidad de las familias que, en ese entonces, vivían en una zona rural.
La historia de la institución comenzó con Don Eustaquio Velázquez, un vecino que, tras ganar un premio en la lotería, compró terrenos en el sector y donó uno a la municipalidad para la construcción de la iglesia Buen Pastor. Posteriormente, el Padre Domingo Viera permitió a las Hermanas Vicentinas utilizar el lugar para dar clases de catequesis.
Ante la necesidad de una escuela, Ema Ceballos, futura directora del establecimiento, solicitó colaboración durante la consagración de la iglesia como parroquia. Nuevamente, Velázquez donó dos terrenos más a la municipalidad para la construcción de la escuela. Así, el 9 de junio de 1958, Ema Ceballos y las Hermanas Vicentinas fundaron la Escuela Parroquial San Vicente de Paul.