Por Noelia Martín- Es el jardín más antiguo de la ciudad y pertenece a la primaria San Martín.
En este año tan especial, en este contexto diferente, las autoridades de la entidad educativa decidieron celebrar de manera virtual, pidiendo fotos y videos de saluditos a sus alumnos y ex alumnos. También solicitaron a los niños que asisten, que lleven manitos de cartulina con salutaciones, para pegar en la puerta del jardín.

Karina Oviedo, directora del establecimiento, manifestó a REDACCIÓN ALTA GRACIA su proyecto de llevar a cabo un museo del jardín, con viejas fotos y elementos que han atesorado, el cual quedó trunco por la pandemia y que probablemente sea reflotado para el 75º aniversario, las Bodas de Diamante. «Aquí se conserva todo lo que se fue adquiriendo, pertenencias de mucho valor, por ejemplo un piano de cola en miniatura, la tierra donde nació Merceditas y San Martín en un cofre, carteles de señales de tránsito hechas por los padres… la idea era abrir un museo durante un mes para que todos los ex alumnos pudieran acercarse» relató Oviedo.
MENSAJE A LA COMUNIDAD
«No tengo más que palabras de agradecimiento, en esta ocasión, como sociedad y como escuela, hemos podido continuar con la educación sin tener demasiados problemas ya que las familias apoyan las propuestas pedagógicas de las señoritas y agradecer al equipo docente por ponerse la escuela al hombro desde la casa, en pos de una educación de calidad.
Al jardín, un feliz cumpleaños enorme, de parte mía y de las `seños´ que están y estuvieron y de los alumnitos que los han hecho llegar los saludos y a los papás que están, que en pandemia los necesitamos cerca y cuando la actividad es normal también».
«Personalmente, sentí desde el primer día, el amor hacia este jardín del que hoy estoy a cargo. Cuando era suplente, soñaba con la titularidad porque es el lugar en el que siempre quise estar. Cuando concursé la dirección fue un sueño importante para mí, porque lo siento parte de mí y de mi familia. Desde 2005 estoy aquí de manera continuada y desde 2018 a cargo como directora. Es un desafío muy grande en este contexto particular. Muy feliz de haber festejado de manera virtual, agradecida por toda la trayectoria, por todas las generaciones que pasaron y por las gestiones de las señoritas, directivos y padres, que hacen que el jardín sea lo que es» concluyó.

Por su parte, Chuchi Tissera, ex docente, recordó la Directora Moll: 2Era creativa, pionera para su época, nos hizo hacer unos uniformes para que estuviéramos cómodas. El Club de Madres compró unas estufas para calefaccionar ya que el lugar era helado. Entre las anécdotas, recuerdo un alumno que era terrible y que se escapaba siempre y con Mercedes-la portera- teníamos que salir a buscarlo».

Maytina Luppi, quien ejerció allí entre 1976 y 1984, relató que fueron años intensos con un grupo humano hermoso, lleno de sueños y utopías. «Pensábamos que en la educación está la clave para el futuro. Fue la mejor época de mi vida».

HISTORIA
El 22 de septiembre de 1950 comenzó a funcionar con unos diez alumnos, quienes eran hijos de vecinos y amigos de la primera directora, Elba Rossi de Oviedo Zelaya. Por aquel entonces la salita se encontraba dentro del colegio San Martín.
El segundo año se abrió la matrícula y en 1953, el lugar ya contaba con 43 alumnos, distribuidos en dos aulas. En 1957, se hace cargo del establecimiento, Haydé Iglesias de Moll. «A las seños las llamaban cariñosamente «tías»: entonces eran la «tía Haydé», «la tía Coca(Gutiérrez)» y la «tía Gloria(Fernández)»-que era la seño de música- narró la directora. Para ese tiempo ya el jardín tenía dos aulas, tres secciones y 107 alumnos.

Rápidamente se expande la matrícula, convirtiéndolo en un jardín de mucho prestigio. En 1983, el sitio inaugura su propio edificio bajo la tutela de la directora Maytinia Luppi.
Desde el año 2000, la institución cuenta con ocho salas, cuatro para niños de 4 años y cuatro para nenes de 5 años. Desde entonces la matrícula es estable -210 niños por año- y muchos quedan afuera.
En relación a las instalaciones, Oviedo explicó: «El Merceditas se caracterizó siempre por el esfuerzo y apoyo de la comunidad educativa. Tempranamente se formó el `Club de Madres´ para llevar a cabo la obra del jardín y para los materiales didácticos. Crece siempre gracias a la colaboración de las familias, en tecnología, el espacio posee aires acondicionados, calefactores, equipos de música y televisores en cada aula. Además se construyó un SUM que en muchas ocasiones es usado por el Ministerio de Educación para actos públicos o reuniones de inspección».
Además la entidad tiene un equipo de estable de teatro, iniciado por dos abuelas, quienes desde el año 2000, producen las obras durante todo el año, relacionadas a las secuencias que se trabajan en las aulas. Las materias de ramos especiales, como educación física y música son brindadas por personal especializado.
Fotos Gentileza: Karina Oviedo