Redacción Alta Gracia– El veto parcial de la ordenanza de debate obligatorio, generó otro fuerte cruce en el Concejo Deliberante. Brunengo le reconoció a Saieg que- en relación a la ordenanza de las PASO- tenía razón.

El intendente Torres vetó algunos artículos, que tienen que ver con postergar para las próximas elecciones municipales (dentro de cuatro años) los debates obligatorios de candidatos, lo que generó versiones a favor y en contra de ésa decisión.

En el Concejo, se volvieron sobre las heridas que aún están abiertas después de la sanción de la ordenanza de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias, la que fue aprobada con el voto radical.

Daniela Ferrari fue quien recordó que fue una de las ediles que más insistió en la falta de debate que tenía la ordenanza aquella que se votó «entre gallos y medianoches», junto al presidente del cuerpo Juan Saieg.

«El intendente por errores propios, está molesto porque ha perdido el control de la agenda del Concejo Deliberante, que está teniendo su propia agenda y muy distinta a la del señor intendente y éso es lo que lo está sacando de sus cabales», dijo Germán Rodríguez (UCR)

Por su parte, Roberto Brunengo fue más allá. «Quien tenga en este momento la posibilidad más certeras de ocupar su lugar (viceintendencia, presidente del Concejo), que va a ser en definitiva quien va a coordinar y premitir que los próximos concejales puedan debatir, está sistemáticamente bloqueando el debate», dijo en relación a Cristina Roca.

Más adelante dijo «viviendo esta situación debo darle la derecha en algunas cuestiones. Cuando presentamos los diferentes proyectos como un paquete de medidas conjuntas de reforma electoral. En aquel momento, entendí que había un grupo de concejales que creía estábamos mejorando la calidad institucional de la ciudad casi finalizando nuestro mandato. Pensé que ese grupo de concejales iban a acompañar de la misma manera los proyectos presentados después del 13 de mayo. Ahora me doy cuenta que lo único que les importa es ver cómo mantienen adentro de una cajita de cristal a sus candidatos, y tenía razón señor presidente (Juan Saieg).»