Leía en el ranking de más vistos, durante muchas semanas, el título de esta miniserie: «Las cosas por limpiar». Y de alguna manera, ingenua, quizás soberbia, me resistía a verla y me estaba perdiendo de algo interesante, emocionante y actual. «Las cosas por limpiar» cuenta la historia de Alex, una madre que se separa huyendo de un marido violento junto con su pequeña hija de cuatro años y debe limpiar casas para sobrevivir. Está basada en hechos reales.
Probablemente lo que más me atrajo de esta miniserie es la crueldad con la que muestra determinadas escenas. No me refiero al morbo, sino a la desolación del personaje principal que debe lidiar con un sistema que la excluye, jefes nada empáticos, una mamá con problemas mentales, un papá que no ve lo grave de su situación, entre otros. Sin spoiler. Lo sé.
Es que las reacciones de Alex, interpretada por la magnífica actriz Margaret Qualley, son siempre moderadas aunque se encuentre sola en una autopista, con su hija llorando y su auto chocado. Otra brillante actuación es la de su mamá interpretada por Andie Macdowell (que casualmente es la mamá de la actriz principal). Y también la de pequeña hijita. Entre los desafíos está reconocerse como «sobrevivientes» a la violencia y saber aceptar las redes que si contienen.
Hay muchos datos sobre la historia real detrás de esta serie basada en un libro escrito por la mujer real. Pero no lo busques hasta que termines así no te spoileas.