La lluvia y el viento provocó destrozos, calles anegadas, viviendas inundadas, árboles caídos, y afectó los servicios eléctricos y telefónicos. El agua bajó desde la autovía Calamuchita y anegó el barrio Satyta.
La localidad de Anisacate, ciudad ubicada en el departamento Santa María de la provincia de Córdoba, se vio afectada por un nuevo fenómeno climático, el anterior fue hace trece meses, de gran envergadura que provocó crecidas de ríos, anegamientos en calles, inundó viviendas, dejó árboles caídos, afectó los servicios eléctricos y telefónicos.
El temporal de agua y viento que comenzó a las 20 del 3 de marzo y continuó hasta al menos las 2 de la madruga del 4, inundó a 100 viviendas del barrio Satyta, uno de los más tradicionales de la localidad.
La intendenta Natalia Contini contó a La Voz quela horamás crítica fue a las 0 del martes cuando un viento “huracanado”, de más de 100 kilómetros por hora, provocó grandes daños. “Fue muy fuerte. Llovía en circulo”. Y en pocas horas cayeron más de 100 milímetros.
Incluso la ruta 5 también estuvo cortada, entre Anisacate y Villa Ciudad Parque, por la caída de árboles.
El viento arrancó los árboles de cuajó y los aplastó. Más tarde, el agua bajó hacia los desagües”, relató.
El viento y la lluvia afectó a la población de casi 12 mil habitantes, los dejó aislados sin poder comunicarse por la falta de energía eléctrica. Por suerte, no hubo personas lesionadas, pero si están “bajo una situación de estrés”. “El agua llegó a un metro en algunos sectores”, narró la intendenta.
Además, durante la madrugada desde el municipio evacuaron a una familia con un niño de dos años. El resto de las personas que tenían sus casas inundadas se quedaron en el lugar cuidando sus pertenencias hasta que el agua mermó.
Satyta, el barrio más afectado
“Nos inundamos el 31 de diciembre de 2023 y 13 meses después se repite. Solo que esta vez con una gravedad inusitada y con agua que proviene de otras localidades”, expresó la intendenta de Anisacate.
Y afirmó que aún resta saber las causas por las que la lluvia afectó sobre todo al barrio Satyta, que da hacia la zona de la nueva autovía Calamuchita, un trayecto de más de 27 kilómetros de extensión, que une Alta Gracia con el dique Los Molinos.
“No es agua de nuestro pueblo sino que es la que vino de la autovía o de la zona del arroyo del Carmen. Interpreto que es así por la modificación territorial y es la primera vez que sucede. Falta realizar los estudios técnicos para corroborar si es así”, indicó.
Y agregó que en el temporal anterior también les tocó vivir situaciones adversas y pudieron corregirlo en el terreno. Ahora, “tenemos que buscar la falla para saber cuál es el problema”, manifestó
Fuente: La Voz