Foto: Télam

Una niña de 10 años, de Alta Gracia, estableció comunicación con la base antártica tras obtener su licencia de radioaficionada.

La audiencia de LRA 36 «Arcángel San Gabriel», la única emisora de radio en la Antártida transmitiendo desde la base argentina Esperanza, se ha expandido más allá de los límites geográficos de la región polar, atrayendo a radioaficionados de diversas localidades del país y del mundo.

Juan Benavente, coordinador de la radiodifusora antártica, manifestó que la mayoría de la audiencia de LRA 36 está compuesta por entusiastas de la radioafición que buscan el desafío de establecer contacto con estaciones lejanas, difíciles y exóticas. Este año, por primera vez, gestionaron una licencia de radioafición para transmitir fuera de los horarios de programación de la estación, bajo el nombre de L36Z, permitiendo a los radioaficionados conectarse con la base antártica.

En un hecho histórico, la base antártica apadrinó, por primera vez, a una niña radioaficionada de 10 años de Alta Gracia, Córdoba, quien realizó su primer comunicado con la base después de obtener su licencia. El coordinador de la radiodifusora manifestó que ella misma les dijo «son mis padrinos».

Desde la base Esperanza, los radioaficionados realizan llamadas generales en distintas frecuencias, recibiendo respuestas tanto de radioaficionados argentinos como extranjeros. Han establecido contacto con radioaficionados de todas las provincias argentinas, así como de puntos remotos como Alaska, Escandinavia, el norte de Rusia, Japón, Oceanía y Filipinas.