En julio de este año, los primos Uriel Cardozo, de 18 años, y Valentín Casas, de 13, perdieron la vida tras chocar en moto contra un auto en San Isidro. La familia reclamó este viernes frente a fiscalía dado que aún no están los peritajes y el conductor del auto no cuenta con imputaciones.
En julio de este año, dos jóvenes de 18 y 13 años colisionaron con Renault Sandero conducido por un hombre de 56 años en la Ruta E-56.
El resultado fue trágico, con el fallecimiento del joven de 18 años en el lugar, identificado como Uriel Cardozo. Su acompañante y primo, el menor de 13 años, fue trasladado al Hospital de Niños de la Ciudad de Córdoba. Valentin Casas finalmente murió debido a sus múltiples lesiones días después.
Este viernes, familiares de los jóvenes se concentraron en fiscalía en Alta Gracia, debido a que aún no hayan justicia en el accidente de los chicos.
«El hombre estaba en contramano al ingresar a su casa y mis sobrinos venían en la moto. Él andaba con el celular, no sé si estaba alcoholizado, pero desde ese día nunca apareció en la casa de mi hermana, ni pidiendo disculpas. Hace cuatro meses que pasó el accidente, y mis hermanas no tienen respuesta de los fiscales. Estamos pidiendo justicia y queremos que el hombre sea declarado culpable, que pague por lo que hizo», manifestó Sofía Almirón, tía de una de las víctimas, en diálogo con Redacción Alta Gracia.
La familia sostiene que sobre el hombre que conducía el auto no recayó aún ningún tipo de imputación y que aún se moviliza libremente en el vehículo contra el cual colisionaron los dos adolescentes. Afirman, además, que desde hace cuatro meses están aguardando por los peritajes de la causa.
«Mi sobrino Valentín estaba de vacaciones en la casa de mi hermana y, unos días antes de regresar a su casa, pasó este accidente», explica sobre la relación que unía a las víctimas.